Los Paraderos del Ramal Pichilemu.

Centinela: Paradero - Empalme ubicado a 50 mts., del puente Tinguiririca.

Centinela fue el reemplazo del empalme Cantera Centinela ubicada a 1.100 metros (cuya línea férrea fue levantada en los años 70) del puente Tinguiririca.

El nuevo empalme se comenzó a usar, aproximadamente desde el año 1888, hasta la actualidad.



Fig. : Locomotora 607 en el paradero Centinela. Foto de Juan Cornejo A. Año 2008.

 La Tuna: Este paradero de ubica en el km. 7,7 del ramal a Pichilemu, entre las estaciones de Manantiales y Placilla. El tren se detenía unos instantes para que los pasajeros que iban a ese lugar descendieran o ingresaran a los coches, realizada esta labor, se continuaba el trayecto.


Fig.: Paradero La Tuna. Foto de Juan Cornejo A. Año 2007.

Pucudegua[1]: Paradero ubicado en el km. 18.2, específicamente entre las estaciones de Placilla y Nancagua, al igual que el de La Tuna, el tren se detenía unos instantes para que los pasajeros subieran o bajaran del tren.

Fig. : Paradero Pucudegüa. Foto de Juan Cornejo A. Año 2007.

Lihueimo: Paradero ubicado entre la estación de Colchagüa y Peralillo, el cual servía para los habitantes de esa localidad; los trenes se detenían diariamente.     




 
Fig. : Paradero Lihueimo. Foto de Juan Cornejo A. Año 2008.

San Miguel de Las Palmas[2]: Último paradero del ramal de Pichilemu, se ubicaba en el km. 90.0. Toma el nombre del fundo que estaba colindante al ferrocarril. Cumplía la misma labor que los otros dos paraderos, el tren se detenía unos minutos para que los pasajeros subieran y bajaran, y así continuar hacia su nuevo destino. Aquí existía una plataforma donde los pasajeros abordaban o descendían del convoy. Cabe destacar que se encuentra entre las estaciones de Cardonal y El Lingue, cercano al túnel de El Árbol. En la actualidad todavía se puede ver el andén. Desde el año 2006, se encuentra sin vía férrea producto del levante de rieles.



Fig.: Estado Actual del paradero San Miguel. Foto de Juan Cornejo T. Año 2013.

 

 

 

 

 

 

 

 

 



[1] Algunos también lo conocían como Pupudegüa.

[2] Según se cuenta  en aquel lugar existía un bosque de palmas chilenas las cuales para sacarle toda su miel las arrancaron extinguiéndolas en su totalidad, hoy en día  no existe ninguna de sus especies en dicha zona.