Juan de Dios Acuña Muñoz.

Juan de Dios Acuña Muñoz[1], nació en el año de 1884, hijo de españoles llegados a Chile a principios de 1900, sus padres eran Don José Miguel Acuña y María Muñoz; teniendo como hermano menor a Guillermo Acuña.

 

Fig. : Firma de don Juan de Dios Acuña, año 1936, fuente Registro Civil, gentileza Juan Cornejo A.

Estuvo casado con Sara Zúñiga Rodríguez también española, quien era hija de José Luis Zúñiga y de Mercedes Rodríguez. Se sabe que tuvo una hermana llamada Sofía, quien residió en el puerto de Valparaíso.

El matrimonio tuvo cuatro hijos: Blanca, Matilde, Luis Armando y Juan de Dios.

Trabajó como jefe de estación en: Barón – Valparaíso; Traiguén; Yumbel, Chillán; Talca.

De ahí trabajó en Manantiales y Placilla del Ramal Pichilemu y terminó en el año 1934 en San Fernando, fecha en que jubila de Ferrocarriles del Estado.

De sus hijos, Matilde fue telegrafista del ferrocarril en Talca y Luis Armando cumplió la misma función en la Estación de San Fernando.

Con el paso del tiempo, su hermano Guillermo Acuña M., también fue ferroviario, debido a sus estudios en el área de la Ingeniería, desempeñándose como inspector en la Maestranza San Bernardo para luego ocupar el mismo cargo, pero de la Red Sur de Ferrocarriles del Estado.

Don Juan de Dios Acuña M., era estricto pero muy humanitario, según cuenta una de sus nietas, quien agrega que encontrándose de jefe de la estación de Chillán cobijó y dio trabajo en su hogar a la señora Carmen Parra, la cual tenía dos hijos: Alberto[2] y Enrique Parra[3].

Don Juan de Dios Acuña, falleció el 24 de Diciembre de 1939, casualmente un mes después de la muerte de su esposa, en su casa de calle Nacimiento, actual Olegario Lazo Baeza, de la ciudad de San Fernando.

 

Luis Armando Acuña Zúñiga.


Fig. : Imagen de Graciela Pavez y Luis Armando Acuña, foto de Juan Cornejo A.

Luis Armando Acuña Zúñiga[4],  nació en el año 1900.

Hijo de Juan de Dios Acuña Muñoz, jefe estación de la Red Sur de Ferrocarriles del Estado entre ellos de Estación  Manantiales y Placilla del Ramal San Fernando a Pichilemu; y de Sara Zúñiga Rodríguez.

Casado con Graciela Pavez Carreño, quien era hija de Gregorio Pavez[5] y de Felicinda Carreño[6].

Este matrimonio tuvo siete hijos: Adriana, Margarita, Eliana, Rebeca, Sara, Juan de Dios, Luis Armando.

Luis Armando, cursó sus estudios superiores de Ingeniería en la ciudad de Santiago, donde luego prestó servicios en la oficina del Telégrafo en la estación de San Fernando, y posteriormente como contratista en el camino hacia las Termas del Flaco.

Falleció en San Fernando el 26 de Junio de 1956.

Pedro Castro Villalobos

Pedro Segundo Castro Villalobos, oriundo de San Fernando, hijo de Pedro S. Castro Santander y de María Mercedes Villalobos Arelluna. Nació el 19 de Mayo de 1932, casado con Ana Eliana Aedo Troncoso con la cual tuvo tres hijos: Ana María, Mónica Gilda y Pedro Castro.

Ingresó a ferrocarriles el 30 de Abril de 1956 después de haber trabajado en la compañía de teléfonos de San Fernando, dejando en su puesto a Juan de Dios Acuña Pavez[7]. Su padre siempre le dijo a Don Pedro: que su profesión era ser Maquinista y un buen ferroviario.


Fig.: Don Pedro Castro. Foto original y Gentileza Pedro Castro Villalobos y José Sarabia.

 Comenzó como fogonero de segunda, maquinista de tercera (Maquinista de patio), maquinista de segunda, hasta llegar a ser un excelente maquinista de primera. Estudioso de por vida de las Locomotoras y máquinas, es una biblia de las locomotoras a vapor y diésel. Al conversar con el da plena satisfacción de que las conoce de memoria, como si fueran sus hijos.

En su historial relata que fue maquinista de segunda en los cargueros Nº 307 y 305 que llegaban hasta la ciudad de Talca, y maquinista de primera lo fue en el tren n° 11  y en el 37. También fue  maquinista en el  tren n° 1005 – automotor que llegaba hasta Chillán sin parada–y en el 1023 y 1024 (Rápido la Frontera que llegaba hasta Temuco). También hizo sus recorridos en las locomotoras tipo ochenta la 806 y la 839 entre algunas que recuerda, además de las tipo cien como la 1009 y 1010. También, fue maquinista en los Ramales de Las Cabras y en el Ramal a Pichilemu.

Entre tantas anécdotas nos relató sobre la locomotora n° 904, que en el año 1950 dejó un no muy pequeño cráter en la vía férrea al reventársele la caldera, ya que al maquinista y su ayudante se les olvidó cortar el paso del vapor donde las válvulas de escape se trabaron, generando la explosión de la caldera.

El 25 de Abril de 1968 realizó el curso para locomotoras eléctricas tipo 30 y 32, desarrollado en Santiago en la maestranza San Eugenio, el cual tuvo una duración de cuarenta y cinco días hábiles.

Entre los años 1969 a 1970 fue maquinista de primera de las tipos 30 y 32 en Santiago y entre 1971 y 1973 en San Fernando, volviendo a Santiago en 1974.

Se acoge a retiro de Ferrocarriles en 1983, siendo el último tren que manejó: el nocturno Alameda a Chillán (Nº 7).

Con mucha alegría dice que el año 1987 fue partícipe de la restauración estética que se le hizo a la locomotora Nº 607 tipo 57 en San Fernando. Más tarde, fue uno de los ferroviarios que participó en los ajustes  para dejar operativa la locomotora a vapor 607, con la finalidad de que remolcara al Tren del Vino.

María Inés Córdova Lange.

Fig. Izq. a Der: Sra. Mirna Córdova, María Inés Córdova, Juan Cornejo Torrealba y Juan Cornejo Acuña.

 Nació el 08 de Enero de 1915 en la ciudad de Teno, la mayor de tres hermanos. Su hermano René nació en Molina y su hermana lidia en Puente de Maipo.

Los padres de María Inés Córdova fueron Don Filidor Córdova Pérez y Doña Inés Lange Morel.

Sus abuelos maternos fueron Don Rudolfo Lange, Ingeniero químico alemán el cual trabajó varios años en las salitreras, y su abuela materna Sofía Morel Fuentes, de nacionalidad peruana, ambos terminaron viviendo en Alemania.

Cuando su padre se encontraba ejerciendo de jefe de la Estación de Colchagua, supo la noticia de que el día 05 de Enero de 1926 pasaría el primer tren con destino a Pichilemu.

Fue así que el día martes 05 de Enero de 1926 alrededor de las 08 hrs se detuvo en Colchagua la locomotora con sus coches llenos de gente. Fue ahí donde ella subió junto a sus padres, sus hermanos; su madrina y familiares que se encontraban de visita en aquel entonces para continuar con el viaje hacia Pichilemu.

María Inés Córdova, estudió en San Fernando en las monjas Argentinas. Este colegio funcionaba donde actualmente está la Inmaculada Concepción. Posteriormente esta institución se trasladó a Rancagua.

En el año 1933 contrajo matrimonio con Manuel Segundo Córdova Morales, oriundo de la ciudad de Teno. La unió en vínculo matrimonial, el mismo sacerdote que le hacía clases de religión en las Monjas Argentinas. Más tarde, tuvo dos hijas Mirna Egle Córdova y Mónica del Carmen Córdova.

Cabe destacar que, Don Manuel Córdova, fue un connotado empresario hotelero[8] en Pichilemu, siendo también alcalde suplente, regidor y gran impulsor del primer cuerpo de bomberos de Pichilemu, junto al Doctor Sánchez, Armando Caroca, Osvaldo Vidal y otros. La inauguración del primer cuerpo de bomberos de Pichilemu se hizo en su casa de Avenida Ortúzar.

Falleció en Septiembre del año 2014.

Remigio Antonio Cornejo Escobar.

Nació en el fundo Alcones cercano a la estación de Ferrocarril El Sauce, que después se pasó a llamar Alcones. Este fundo era propiedad de la familia Menéndez Behety, desde el año 1936. Hijo de Don Manuel Cornejo Paredes administrador del fundo Alcones y de Regina Escobar. Tenía siete hermanos, Rolando, Agustín, Carlos, José Santos, Hernán, María y Graciela.

Casado con María E. Cornejo Bustamante.

 

Fig.: Sra. María Cornejo y Remigio Cornejo en el tren de Pichilemu a Alameda. Foto original y gentileza Sra. María Cornejo B.

En su juventud trabajaba de tractorista en el fundo administrado por su padre. A comienzos de 1950, ingresó a Ferrocarriles del Estado en San Fernando. Para llegar a ser fogonero, tuvo que viajar a Santiago, donde debían tener un cierto kilometraje para ello, por lo que debía cumplir dicha labor, desde Santiago a Curicó, en una locomotora a vapor de pasajeros. De esta manera, realizó varios trayectos hasta completar el kilometraje, con lo cual finaliza el curso, obteniendo el grado de Fogonero.

Luego inició el curso para maquinista de tercera, donde estuvo a cargo de trenes lastreros y de patio; para luego ascender a maquinista de segunda, estando a cargo de trenes de carga y del pescante. Para llegar a ser maquinista de primera, tuvo que realizar otra instrucción, que la llevó a cabo con pleno éxito.

Trabajó en el ramal a Pichilemu tanto con vaporeras como locomotoras diesel D-7100, donde también – luego de otro curso- estuvo a cargo de dichas máquinas.

Falleció en San Fernando.

                                         Francisco Cornejo Ormazábal


Don Francisco Segundo Cornejo Ormazábal, nació en la localidad de Paredones el 16 de Julio de 1926. Sus padres fueron Isaías Cornejo Galaz y Sara Ormazábal Flores. Casado con doña Sara Acuña Pavéz, con quien tuvo 8 hijos. A los 19 años de edad ingresó al regimiento de infantería Andalién n° 13 de la ciudad de San Fernando.

En el año de 1946 ingresa a F.F.C.C. del Estado como reemplazante en la estación de San Fernando. Ese mismo año es derivado a la estación de Malloa ramal El Carmen– con la función de cambiador. Aproximadamente desde mediados del año 1946 hasta el año 1948, es asignado como palanquero persona que entrega y desarma carros de carga del tren de carga Nº 201, entre las estaciones de Alameda y Puerto Montt. Sin embargo, a mitad del año 1948 fue trasladado en la misma función a los trenes de carga Nº 235 – 236 en el ramal de Pichilemu. En 1949, fue enviado a la estación de Larraín Alcalde como vigilante; siendo el jefe de estación en ese entonces don Dagoberto Palacios.

                                  

Fig.: A la derecha Francisco Cornejo Ormazábal, en la estación San Fernando, foto de Juan Cornejo A, año década de los 70.

En 1950 es nuevamente reasignado como guardia a la estación San Fernando. En ese mismo año, es asignado como reemplazante en las estaciones de Manantiales, Placilla, Paniahue, Palmilla, Peralillo, Pichilemu. Posteriormente, se desempeñó como asistente de conductor en los trenes 37-38 de pasajeros, tren local del trayecto de San Fernando a Pichilemu y viceversa.

fig: Don Francisco en la cabina de la locomotora a Vapor 607 pronto a iniciar el Servicio Tren del Vino.                     

Foto de Juan Cornejo Acuña año 2008.

Por esos años, en los meses de Enero y Febrero exclusivamente los días Domingo F.F.C.C. del Estado agregaba un tren denominado El Excursionista, donde él cumplió la labor de asistente de conductor.

Más tarde, estuvo de cambiador de trenes en las estaciones de Manantiales, Placilla, Peralillo, Palmilla, Paniahue, y Alcones del ramal Pichilemu. Luego fue nuevamente reasignado, pero  de manera definitiva, como guardia de la estación, bodegón y casa de máquinas de la ciudad de San Fernando. Después de haber cumplido varios años como guardia en esta estación, queda como jefe de guardias, cargo que desempeña hasta el año 1977 el cual sería el último hasta antes de acogerse a retiro luego de 31 años de servicio.

Falleció a los 94 años de edad el domingo 13 de Junio de 2021.

tido con: Público

Quiterio Díaz
Foto: Quiterio Díaz, Carlos Díaz(hijo) y Clara Díaz. Gentileza don Sergio Díaz.

Quiterio Díaz Silva nació el 08 de Noviembre de 1888 en el sector de Ciruelos, comuna de Pichilemu. Sus padres fueron Tiburcio Díaz y Casimira Silva. Estuvo casado con la Sra. Clara Luz Díaz Peña, quien nació el 28 de Diciembre de 1915 en la misma localidad de Ciruelos (ellos no eran familiares solamente es un alcance de apellidos), sus padres fueron Pedro Díaz Castro y Mercedes Peña Gutiérrez.
Según los datos aportados por su hijo Sergio, don Quiterio ingresó a trabajar en Ferrocarriles en la Estación El Lingue aproximadamente en el año 1920 hasta el año 1950. Se desempeñó en la cuadrilla de reparación de Alcones a Pichilemu como clavador.
Dentro de los recuerdos que don Quiterio conversó con su hijo sobre la estación El Lingue, se encuentra:
1) La Estación el Lingue era un lugar de abastecimiento de agua para las locomotoras a vapor y así estas pudieran llegar a Pichilemu. Aquí habitaban un grupo de 15 familias, quienes eran todas ferroviarias (aproximadamente como 50 habitantes).
2) En el lugar había un caballo de agua (M.N., actualmente en el Museo de Ciruelos) que abastecía a la maquina a vapor, cuya agua bajaba de las vertientes del cerro (Actualmente La Mona o El Árbol, antiguamente Butapangue) y que también mantenían a la población que vivía allí.
3) Para la adquisición de alimentos, las personas que allí habitaban compraban al tren de la Cooperativa, el cual pasaba una vez al mes. Este era un tren especial que les vendía de todos a los trabajadores .
Don Quiterio jubiló en el año 1950 y toda su familia se trasladó a la comuna de Palmilla.
Falleció en la ciudad de San Fernando el 16 de Julio de 1968 a la edad de 80 años.
*Como una anécdota, don Sergio comentó que “ Yo en lo personal cuando pequeño viajaba mucho al Lingue. Allí tuve a mi padrino de Bautismo que se llamaba José Ismael Pérez quien estaba casado con la sra. Luchita Arias. En varias ocasiones pasamos a pie al otro lado del túnel El Árbol a visitar a mi madrina, llamada Otilia Pérez, que vivía en San Miguel de las Palmas.

Amián Gálvez González


Fig.: Don Amián Gálvez. Foto original y Gentileza Pablo Martínez.Reproducción Museo Rsfp
En esta ocasión narraremos el trabajo de un carrilano esforzado, muy querido por sus compañeros de labor – en el Ramal Pichilemu- y que gran parte de su vida vivió en la comuna de Marchigue. La siguiente historia se desarrollará en torno a Don Amián.
Don Amián Gálvez González nació en la localidad de Marchigue el 2 de Mayo de 1923.
Sus padres fueron Cupertino Gálvez y Sofia González. Producto de este matrimonio tuvieron 7 hijos -de los cuales don Amián y Gabriel (bodeguero en la estación de Marchigue) fueron empleados de ferrocarriles.
Se casó con la señora Blanca Valdovina Albornoz (nacida un 12 de octubre 1922 oriunda de la localidad de Barraza IV región) con quien tuvo dos hijos: Ricardo y Jimena. Sus nietos son 4 y 2 bisnietos.
Don Amián entró a trabajar a Ferrocarriles aproximadamente en el año 1945. Se desempeñó en el cargo de guardavía en el grupo de carrilanos de Marchigue, jubilando en 1977 de ferrocarriles.
Falleció en la ciudad de Marchigue el 8 de febrero de 2016.


Fig.: Don Amián Gálvez junto a su equipo de trabajo en la estación Cardonal. Foto original y Gentileza Pablo Martínez, Reproducción

Gustavo González Donoso.

 Don Gustavo Arsenio González Donoso, llegó a Pichilemu en el año 1944 con su tío Emilio González Toledo el cual fue jefe de la estación de Pichilemu.

Nació en Santiago el 24 de Mayo de 1932. Hijo de Don Enrique González Toledo y de Adriana Donoso Farías.

 

Fig.  Don Gustavo González, foto de Juan Cornejo A., año 2013.

Su padre fue durante varios años Inspector de Máquinas en el Ramal de Las Vegas a los Andes. En Las Vegas, hacían la combinación con el expreso que venía desde Santiago a Valparaíso y con el tren ordinario que hacía el recorrido de Valparaíso hasta Santiago.

Su ingreso al ferrocarril, lo hizo el año 1953 en la estación de Pichilemu[9] como Aseador y Limpiador de Coches. Ese mismo año recuerda que debido a la celebración del Congreso Eucarístico realizado en el mes de Diciembre, llegó a Pichilemu el tren N° 11 con una Caturra, Diesel Pequeña, que provenía desde San Fernando, la cual estaba compuesta por la locomotora diesel, un furgón, tres coches de primera y seis coches de segunda clase. Para todos fue sorprendente la llegada de dicha composición, producto que hasta ese entonces sólo circulaban las locomotoras a vapor.

Abnegada era la labor de don Gustavo, a veces viajaba hasta la estación de Colchagüa y combinaba con el tren n° 11 para hacer un aseo más prolijo a los coches en general.

El año 1962 terminaron de viajar las locomotoras a carbón con pasajeros hasta Pichilemu y  se dio paso a las diesel o petroleras.

Cada vez que arribaban los trenes de pasajeros a la estación de Pichilemu, luego de su largo viaje, los estanques de agua llegaban vacíos, por lo que él debía procurar que el tren iniciara el viaje con los estanques llenos con agua. Además, debía preocuparse que los asientos, ventanas y los pisos de los carros los cuales se ensuciaban con mucha facilidad estuviesen limpios, con la finalidad de que no existiese ningún problema durante el trayecto

Actualmente reside en Pichilemu y su historia demuestra la importancia de un Aseador y Limpiador de trenes en el Ramal de San Fernando a la costa y el resto de los F.F.C.C. del país.

Alejandro Guzmán Schremser.

Nació en la ciudad de San Fernando. Realizó sus estudios  en el Liceo de Hombres –el cual actualmente se conoce con el nombre de Neandro Schilling– los que continuó en el Instituto Nacional.

Sus estudios superiores los efectuó en la “Universidad de Chile, donde obtuvo el título de Ingeniero Civil, el 4 de diciembre de 1893” (Matus  & Vassallo, 1943: 92).


Fig.: Imagen del Ingeniero Alejandro Guzmán. Fuente de la  fotografía: Ferrocarriles de Chile: Historia y Organización; año 1943.

     Dentro del abultado currículum del Ingeniero sanfernandino –según Matus y Vassallo– en lo respectivo a ferrocarriles en construcción se destacan:

a) “Ingresó a la Administración Pública como sub-teniente de Ingenieros Militares” (Matus & Vassallo, 1943: 92).

b) “El 9 de marzo de 1893, fue nombrado Ingeniero segundo de la sección de puentes y caminos de la Dirección de Obras Públicas” (Matus & Vassallo, 1943: 92).

c) “El 9 de Enero de 1894, actuó como Ingeniero 1° primero del ferrocarril en estudio de Temuco a Pitrufquén” (Matus & Vassallo, 1943: 92).

d) “El 21 de mayo de 1895, fué nombrado Ingeniero 1° del ferrocarril en estudio, de Melipilla a Quilpué, pasando por Marga Marga” (Matus & Vassallo, 1943: 92 - 93).

e)  “El 27 de Junio de 1895, ascendió a Ingeniero jefe de sección en el ferrocarril en construcción de Vilos a Illapel y Salamanca” (Matus & Vassallo, 1943: 93).

f) “Es designado Ingeniero residente el 26 de septiembre de 1896, teniendo a cargo la explotación ferroviaria de la línea de Osorno a Pichirropulli” (Matus & Vassallo, 1943: 93).

g) “El 22 de Mayo de 1900, actuó como Ingeniero jefe del ferrocarril en estudio de Osorno a Puerto Montt, presentando el anteproyecto de esta línea y al cual se ciñó el estudio definitivo” (Matus & Vassallo, 1943: 93).

h) “El 30 de mayo de 1901, es nombrado Ingeniero jefe de ferrocarril en estudio de Chillán a Tomé el 30 de mayo de 1901” (Matus & Vassallo, 1943: 93).

i) “El 21 de noviembre de 1905, fue nombrado inspector visitador de los ferrocarriles en estudio y construcción” (Matus & Vassallo, 1943: 94).

j) “El 24 de mayo de 1906 desempeña el cargo de Jefe de la Inspección General de Obras Públicas” (Matus & Vassallo, 1943 : 94).

Posteriormente Guzmán, sería “comisionado como Ingeniero Jefe de la Sección Técnica de los trabajos del Ferrocarril Internacional de Arica a la Paz. Dirigiendo allí personalmente los estudios de la sección chilena, cambió totalmente el trazado que había propuesto Don Josías Harding” (Matus & Vassallo,, 1943 : 94).

Sin embargo, para el ferrocarril Pichilemu, es muy importante gracias a que:

“El 5 de marzo de 1902 es designado Ingeniero jefe del ferrocarril en estudio y construcción de Alcones a Pichilemu, en este ramal se encuentra el túnel El Árbol con 1975 mts de longitud ,el más largo de Chile hasta ese año .Ahí le correspondió colocar el eje, es decir la dirección que debía seguir la perforación de las galerías de avance que se iniciaron por las bocas oriente y poniente, juntando las galerías en la mitad del túnel tan solo con una desviación de 3 centímetros en sentido horizontal y un centímetro en sentido vertical” (Matus & Vassallo, 1943: 94).

Pero su aporte trascendió, ya que él terminó los cambios iniciados por el Ingeniero Ascencio Astorquiza al trazado de Alcones a Pichilemu[10] del proyecto original realizado por Domingo Santa María.

El “2 de marzo de 1912 estuvo como Director interino de Obras Públicas” (Matus & Vassallo, 1943: 95), no obstante, fue designado como “Director General de los Ferrocarriles del Estado el 30 de Agosto de 1912” (Matus & Vassallo, 1943: 95), al cual renunció en Mayo de 1914, porque es asignado a la “Dirección de Obras Nuevas” (Matus & Vassallo, 1943: 95).

En 1915, retorna al “cargo de Director General de los Ferrocarriles” (Matus & Vassallo, 1943: 95), hasta el 14 de Julio de 1918, debido a que  fue designado como “Director de la Caja de Retiro y Previsión Social de los Ferrocarriles” (Matus & Vassallo, 1943 : 95), el cual fue  el  último cargo en el cual trabajó.

Don Alejandro Guzmán, jubiló en el año 1924, falleciendo en la ciudad de Santiago el día martes 3 Enero de 1939.

Belisario del C. Llanca Peña.

Don Belisario del C. Llanca Peña, fue carrilano de Marchigüe y otros puntos de la red ferroviaria. Hijo de Alberto Llanca y de Berta Peña Núñez. Nacido en Curicó el 18 de Enero de 1938, vivía en La Cantera[11], que quedaba entre las estaciones de Palquibudi y la estación de La Huerta, en el ramal Curicó a Licantén.

Sus estudios los hizo en la escuela Nº 5 de La Huerta, estando en dicho establecimiento hasta sexto básico, para después proseguir sus estudios en Curicó.                                    

Se casó con Silvia Lara con la cual tuvo siete hijos de los cuales hasta el día de hoy se siente muy orgulloso.

En el año 1959 ingresó a Ferrocarriles del Estado, como operador en la estación de Paine de la línea central.

Fig. : Don Belisario Llanca(a la izquierda),  junto a Benedicto González (a la derecha), ambos ex ferroviarios. Foto de Juan Cornejo A, Septiembre 2007.

Con distinción aprobó el curso de capacitación en Santiago el 30 de Mayo de 1964 en la escuela de jefes de grupo de vía Ingeniero Diógenes Córdova, aquí don Belisario recuerda que este curso lo hizo con otro carrilano que trabajó en el ramal Pichilemu, Don Víctor González Pino –quien es el padre del también ferroviario, investigador y amigo– Benedicto González V.

Se trasladó a Alcones el 01 de Julio de 1966, trabajando en el grupo de vía y obras con sus amigos: Héctor Ortiz, Luís Orellana Palominos[12], Ramón León, Osvaldo Rubio, Feliciano Abarca Vargas, Manuel Álvarez, José Contreras, Manuel Leiva, Luís Rubio, Guillermo Carreño, José Salinas, Manuel Carreño. Junto a ellos andaban por la vía en un Motorriel, específicamente en el FA-25 de cuatro cilindros.

Comenzaban sus labores desde el km 72 (Marchigüe) hasta el km 92 –entre Tierra Amarilla y el túnel de El Árbol– donde estuvo hasta el 30 de junio de 1972. Cuenta que aquí les tocaba un gran trabajo, ya que se debía dejar en excelente estado la mantención de la vía para el paso del tren a Pichilemu y viceversa.

Entre sus recuerdos, comenta sobre los servicios 11 - 12[13]; el expreso, el 11 A - el 12 B[14], que saliendo de la estación de San Fernando enfilaba rumbo hacia Pichilemu, pero lo particular era que se detenía en algunas estaciones, dentro de las que menciona Santa Cruz, Peralillo, Marchigüe y obviamente Pichilemu, sin embargo, era solamente cuando existía mayor flujo de pasajeros en el verano; el local 37 - 38[15]; el carguero 235 – 236 y el recordado Excursionista[16].

Luego de varios años trabajando para ferrocarriles, jubila en la década de 1990. A pesar de eso se integra al proyecto Tren del Vino, donde se encarga de cumplir la labor de arreglar la vía, al igual que en el tiempo de oro de ferrocarriles.                      

 

Leontina Lizana Vargas.

Nació el 4 de mayo de 1954 en la localidad de Larraín Alcalde, sus padres son don Isidro Lizana Lizana y Berta Vargas Galaz.

Su padre era jornalero en el Fundo El Puesto, propiedad de Carlos Echazarreta Larraín y su esposa María Iñiguez Infante[17] los cuales tenían tres hijos: Lucrecia, Carlos y José Horacio. Recuerda que entró a primero básico en la Escuela de Larraín Alcalde en 1961, allí ocupaban dos salas, una era para alumnos de primero a cuarto y la otra de quinto a séptimo.

Fig.: Sra. Leontina Lizana, foto de Juan Cornejo A., año 2013.

Leontina tuvo dos profesores, en 1960 comenzó con Mario Vera González y terminó el séptimo con Elena Vargas C. (ellos vivían en piezas habilitadas  para los profesores en la misma escuela).

Viajaba a pie muy temprano desde el sector de Puente de Mulas, donde ella vivía y se venía a la escuela con los trabajadores del Fundo El Puesto.

Los principales juegos de aquellos años eran la nación, la cola de zorro, el tombito, el luche y otros que ellos mismos creaban. Recuerda a sus compañeras de curso como si fuera el día hoy, ellas eran: Gloria Castro muy amiga; Marina Cornejo, Mireya Cornejo, Silvia Allende, María Pavez, Francisca Jorquera, Luis Jorquera, Luis Salinas, Alfonso Barra, Eladio González, Gilda Pavez, Francisco Lizana, Nelly Lizana, Patricio Lizana, Marco Lizana, Rebeca Vargas, Oriana Urra entre otros.

Recuerda a la hija de Don Pedro Mendieta y Teresa Salas, dueño de la pulpería aledaña al recinto de la estación Larraín Alcalde. También a la profesora Delia Mendieta Salas[18], la primera educadora de la escuela, quien siempre hacía participar a los alumnos en bailes y otras actividades en Pichilemu.

La Señora Leontina actualmente reside en Pichilemu.

Luis Fernando Lorca Opazo

Cuando viajábamos en tren entre las ciudades de San Fernando y Pichilemu, los viajes siempre eran preparados con mucha anticipación, sobretodo si eran de vacaciones. Era común el nerviosismo por llegar pronto a la playa, por ende, había que arreglar las maletas tratando de llevar hasta lo imprescindible, todo esto debido a que -en algunas oportunidades- la estadía era por más de un día y muchas veces al año.

En varias estaciones de nuestro Ramal San Fernando a Pichilemu siempre hay alguien que te ayudaba con el traslado de tus maletas y otras tantas cosas que uno transportaba. Es así, como queremos expresar, a través de estas palabras, la vitalidad y el importante papel que desarrolló Don Luis Fernando Lorca Opazo: trasladador de equipaje en la estación de Pichilemu. Si bien no pertenecía a la Empresa de los Ferrocarriles del Estado, su abnegada labor lo hace merecedor de la condición de Ferroviario.

 Fig. Don Fernando Lorca. Foto y gentileza Sra. Bristela Lorca
Tomando en cuenta lo anterior, hemos querido plasmar en la historia humana la importante labor de este noble trabajador del Ramal -evocando sus incidencias más notables, su responsabilidad- que lo llevó a trabajar normalmente en esta vía férrea: un ejemplo de cortero en el ferrocarril de San Fernando a Pichilemu.

Don Luis Fernando Lorca, nació en Requínoa el 25 de Febrero de 1923. Fue hijo de Jeremías Lorca y de Mercedes Opazo. Realizó su servicio militar en Buin el año 1941. Llegó a la ciudad de Pichilemu, proveniente de Palmilla, a principios  de los años 60 con su esposa. El padre de don Fernando había vivido en la ciudad de Santa Cruz por motivos de trabajo en la estación ferroviaria del mismo nombre. Al estar cercana a la localidad de Palmilla conoció a quien fuese su esposa: la señora Laura Rosa Pérez Díaz -oriunda de ese lugar e hija de Desiderio Pérez y de Ema Rosa Díaz.

Fig: Matrimonio Lorca Pérez, foto gentileza Sra. Bristela Lorca.

Luis Fernando y Laura tuvieron producto de su matrimonio[1] 7 hijos cuyos nombres son: María, Casilda, Fernando, Bristela, Juan, Andrés y Carlos.

La función que tuvo fue la de cortero, persona que llevaba las maletas de los pasajeros que llegaban a la estación de Pichilemu hasta los cabritas o coches a caballos, residenciales cercanas a la estación, etc.

Su hija comenta una anécdota de su padre bajo esta función: “recuerdo cuando había que hacer transbordo en la Estación El Lingue, porque se había descarrilado el tren. Al lado del convoy recién llegado estaba el tren Excursionista. A nosotros esto nos favorecía, ya que, con mi padre sacábamos mariscos y cochayuyo con la finalidad de llevarlo a Palmilla para venderlo  o en su defecto los cambiábamos por cosechas de la época”.

Luis Fernando Lorca falleció un 15 de abril de 1985.

                                                           Anecdotario

Dentro de su labor don Luis Fernando tuvo muchas vivencias, de las cuales compartiremos algunas:

Nuestro protagonista siempre destacó a Don Carlos Rojas Pavéz[2], puesto que al llegar a Pichilemu él siempre tendió una mano ayudándolo en todo lo que don Fernando necesitara.

Reflexiones y anécdotas de su hija Bristela[3] sobre su padre nos dice:

“Esta es la reseña biográfica de un cargador ferroviario como Don Luis Fernando relatada a través del conocimiento de su campo de trabajo: en el que tuvo la oportunidad de ser actor principal, donde conoció el ferrocarril y sus personas como eran en aquellos años. Él no sabía de horarios de trabajo y tarifas, su sustento quedaba a voluntad de cada persona, con normativas que sólo mi papá creaba, donde sus manos eran su elemento principal de transporte. Tuvo la oportunidad de conocer desde el jefe de estación pasando por el conductor, inspector, maquinistas, fogoneros, cambiador, guarda cruce, carrilanos y en general a todos los que estaban pendientes de la línea y de aquel penacho de humo negro - blanco de las locomotoras a vapor como también de las diésel de su época.

Fig: Don Luis Fernando Lorca junto a un coche de pasajeros y una Diesel D-7100 en el andén 1 de la Estación Pichilemu. Foto y gentileza Sra. Bristela Lorca.


[1] El sacerdote que celebró sus nupcias en aquel entonces era Luis Alberto Ramírez Cerda quien estuvo en Palmilla entre los años 1953 a 1968, anteriormente había estado en 1952 en la Parroquia de San Fernando.

[2] Quien fue alcalde de esa localidad entre 1967 y 1971.

[3] Hija que nos facilitó información y fotografías de su padre.


                                   Sergio René Martínez Albornoz.

Don Sergio Martínez, maquinista del ramal a Pichilemu, nació en Valparaíso –específicamente – en el Cerro Barón, un 13 de Febrero de 1930. Sus padres fueron don Julio Martínez (fue ferroviario, desempeñándose en la sección transportes en Valparaíso, Santiago y  Curicó) y Teresa Albornoz,. Tuvo un hermano, el cual se llamaba Julio Martínez, el que  fue inspector, para posteriormente ser ascendido a conductor, trabajando en ese cargo en el trasandino de Los Andes.

Fig.: Maquinista Sergio Martínez. Foto original y gentileza Sra. Amada Ahumada.

 Sus estudios primarios los realizó entre los años 1936 al 1941 en el Instituto San Martín de Curicó, para luego continuar en el Liceo de Hombres de la misma ciudad entre 1942 y 1947.

Sus  inicios como ferroviario los comenzó en Santiago, el día 27 de mayo de 1949 en la Maestranza San Eugenio. Según su propio relato, cuenta que es “como si estuviera en aquellos años, puesto que empezábamos como limpiador, luego de ayudante fogonero,  Fogonero, ayudante Maquinista, Maquinista de Patio, Maquinista de Segunda -trenes de carga-  y Maquinista de Primera -trenes de pasajeros” (Martínez Albornoz, 2009).

En San Eugenio estuvo como Aspirante, de ahí se vino a San Fernando en 1949,  para luego trasladarse a Talca en 1950, regresando posteriormente en el año 1953 a Rancagua. En 1954 fue enviado a Barrancas, San Antonio, trabajando como Aspirante en el Ramal a Cartagena.

En 1955 empezó a trabajar en la ciudad de San Fernando como aspirante de primera en el Ramal a Pichilemu, luego como Fogonero de tercera, más tarde de segunda y finalmente de primera.

El año 1966, nuevamente vuelve a San Eugenio, pero como maquinista de tercera y el mismo año regresa a la segunda zona de ferrocarriles con el grado de Maquinista de Segunda en un tren lastrero, quedándose definitivamente a trabajar en San Fernando en donde ascendió a Maquinista de primera.

En San Fernando trabajaba en el macho alemán N° 388 y era Maquinista de la locomotora               N° 531 tipo 57 en el Ramal San Fernando a Pichilemu, como también lo fue de la 801 y de la 839 ambas del tipo 80.

Su último viaje como Maquinista de primera lo realizó en el Ramal Pelequén a Las Cabras, el día 30 de Agosto, casualmente para la festividad de Santa Rosa, acogiéndose a retiro el día 31 de Agosto de 1980, como uno de los maquinistas que recorrieron el insigne Ramal a Pichilemu. Se casó con la Sra. Amada Ahumada Adasme, con quien tuvo descendencia. Don Sergio Martínez, falleció el día 21 de Mayo de 2009.

Luís Orellana Palominos.

Nació el 03 de Noviembre de 1921 en la localidad de Codao, sexta Región, trasladándose a los once años a San Vicente Tagua- Tagua. Con orgullo cuenta que desde los 12 años de edad y hasta los veinte fue un campesino que con orgullo trabajaba de sol a sol. Eran cinco hermanos tres hombres y dos mujeres.

Teniendo 25 años en Febrero de 1946 ingresó a trabajar al ferrocarril en el Ramal Las Cabras en la localidad de Requegua distante a seis kms de San Vicente. En Requegüa estuvo solo seis meses y lo trasladaron a San Vicente.

El mismo año 1946 estudió en la escuela pública nocturna de San Vicente, en donde sacó su enseñanza básica. Relata que a veces llovía incesantemente en invierno, pero sus estudios nunca los dejó de lado, por muy duro que le tratara el clima.

En el año 1953 llegó a San Fernando, siendo chofer de un Motorriel en el Ramal Pichilemu entre 1953 y 1963.

Fue vicepresidente de la Unión de Obreros Ferroviarios de San Fernando, durante el gobierno de Don Gabriel González Videla.

Estando en San Fernando el año 1962, fue enviado a Santiago a realizar un curso de dos meses en el Instituto Ferroviario durante los meses de Junio y Julio[23]. Fue así como obtuvo el grado de Jefe de Grupo de Vías y Obras.

En el año 1963 fue nombrado ayudante de jefe de grupo en Rancagua donde permaneció hasta 1967. Este año, al poco tiempo de estar de ayudante, fue nombrado jefe de grupo de Alcones en donde permaneció hasta 1976.

 

Fig.: Arriba del Motorriel, foto original y gentileza de Luís Orellana Palominos.

Personas de Izq. a Der.: Héctor Ortiz, Luís Orellana Palominos, Ramón León, Osvaldo Rubio.

Abajo de Izq. a Der.: Feliciano Abarca Vargas, Manuel Álvarez, José Contreras, Manuel Leiva, Luís Rubio, Guillermo Carreño, Belisario Llanca, José Salinas, Manuel Carreño.

 El grupo de vías y obras de Alcones tenía el sector de pasado Marchigüe hasta el Lingue, pero cuenta que también apoyaban al grupo de Pichilemu y viajaban al balneario a descargar lastreros y hacer reemplazos.

Recuerda que andaban por la vía en un Motorriel FA-25 de cuatro cilindros. Las labores principales que desarrollaban eran mantener en buen estado la vía, es decir, durmientes, rieles, las cunetas de los túneles La Viña, El Árbol, El Quillay, etc., todo era a pulso en aquellos tiempos. Sobre los túneles dice: “los limpiábamos ayudándonos por el alumbrado de lámparas a carburo” (Orellana Palominos, 2008). Sus manos muestran las huellas de lo duro que era el trabajo, pero en esos días felices en que ellos unidos se mantenían unidos para tener de manera óptima el Ramal Pichilemu.


Don Luis Hernán Ramírez Le Fort
Un Jefe de Estación en la Memoria de la Estación Santa Cruz y en nuestro ferrocarril de San Fernando a Pichilemu.
La Empresa de los FF.CC. del Estado ha sido una entidad pública que sigue generando servicios ferrocarrileros, como a su vez, una gran cantidad de anécdotas, relatos, añoranzas, conforme avanza su historia en nuestro país.
Esta narración trata sobre un Jefe de Estación del Ramal Pichilemu. Tener este cargo, en esos años, era digno de prestigio, respeto y algo muy importante: ser considerado a la altura de una autoridad pública.
Nuestro siguiente relato tratará sobre la vida y obra de don Luis Ramírez Le Fort: Jefe de la Estación Santa Cruz.
Luis Hernán Ramírez Le Fort, nació en San Fernando el miércoles 17 de diciembre de 1913 - siendo hermano gemelo de Luis Hernando Ramírez Le Fort y hermano de Ida Ramírez Le-Fort- en su casa habitación ubicada en calle Carampangue de esta misma ciudad. Realizó todos sus estudios en San Fernando, culminando su enseñanza media en el Liceo Neandro Schilling.
La familia de don Luis Ramírez tiene mucha historia en la ciudad de San Fernando, la cual repasaremos brevemente.
El padre de Luis se llamó José Agustín Ramírez Arriagada -nacido el año de 1848 en la localidad de Chanqueahue- tuvo como profesión Agricultor. Él fue Alcalde por varios periodos de San Fernando. Además, cabe destacar, que fue el primer editor del diario sanfernandino “La Justicia”-"cuya primera edición inició su circulación el 13 de septiembre de 1891 y la última el 15 de septiembre de 1906” (La Justicia, 1891 – 1906).
Luego de conocer la vida de los antepasados de nuestro protagonista, seguimos el relato de la historia de vida de don Luis: comenzó su vida laboral en Cristalerías Chile en la ciudad de Santiago, realizando tareas en el área administrativa.
Don Luís tuvo la suerte ser testigo de la llegada del primer tren a Pichilemu -su hija María Luisa menciona que le contaba su padre: “Yo estaba en Pichilemu en esa fecha. Había mucha gente esperando en la estación. La máquina venía adornada como día de fiesta, llegó mucha gente en ese primer viaje. Fue muy hermosa la llegada de ese tren que unía San Fernando con el balneario de Pichilemu”.
Un domingo 31 de enero 1943 se casó en Santiago con María Luisa Gómez Ascencio. Tuvieron siete hijos: María Erna, Hernán Alberto, María Luisa, Hernán Agustín, Elisa del Carmen, Raúl Arturo y Juan Luis.
El mismo año 1943 comenzó a trabajar en Ferrocarriles del Estado como jefe de la estación Santa Cruz -en el sector de Paniahue- del ramal de San Fernando a Pichilemu. Ocupó el mismo cargo en otras estaciones de la misma vía férrea como reemplazante, por ejemplo, Pichilemu. Finalmente -ya en 1947- fue designado de manera permanente en Santa Cruz.
Una de sus hijas – Sra. María Luisa- comenta con respecto a los años vividos en el Ramal de San Fernando a Pichilemu lo siguiente: “Fue para nosotros una vida linda y feliz junto a nuestros padres. Las vacaciones desde diciembre a marzo todos los años eran en Pichilemu en casa de mis abuelos. Ellos fueron una de las primeras familias en llegar allí. Eran vacaciones grandiosas e inolvidables juntos a muchos tíos, abuelos, amistades. La casa era enorme y la visita que más esperábamos”.
Don Luis Hernán Ramírez Le Fort culminó sus labores en Ferrocarriles del Estado en el año 1958.
La Sra. María Luisa relata: Mi padre falleció en Santa Cruz el 1 de mayo del 2004 a los 91 años (donde hubo un toque de presencia ferroviaria cuando personal del servicio Tren del Vino accionó el claxon de la locomotora tipo 57 n° 607 mientras se realizaban los funerales de mi papá a manera de homenaje) y mi madre falleció el 15 de abril 2019 a los 99 años. En la actualidad sobreviven 6 hijos (María Erna falleció un sábado 21.05.2016 a los 72 años) con 18 nietos y 37 bisnietos del matrimonio Ramírez Gómez.

La gentileza y dueña de la fotografías es la señora María Luisa Ramírez G.

Pedro Antonio Rosselot y Frías

Nacido en Santiago en el año de 1859, titulándose en 1882 de Ingeniero. Ingresó “a la Dirección de Obras Públicas en 1888 (Greve, 1944:316).

Un dato importante para la actual región de O´Higgins, se encuentra en que el 25 de Enero de 1888 es nombrado jefe de la comisión encargada del trazado definitivo del ferrocarril de La Palmilla a Alcones(Greve, 1944:316), el cual fue construido entre los años 1888[23] a 1893.

Fig.: Imagen, nombre y firma del Ingeniero Pedro Rosselot. Fuente de la  fotografía: Historia de la Ingeniería en Chile, año 1944.

Posteriormente, se incluye “en los trabajos del de Pelequén a Peumo (Greve, 1944:316).

Al concluir su labor, fue enviado al ramal de Talca a Constitución(Greve, 1944:316).

Don Pedro Rosselot se había iniciado como contratista en el año 1893 con el muelle de Llico(Greve, 1944:316), donde tuvo más tarde importantes obras de construcción, como el ferrocarril de Osorno, contratado en el año 1907 (Greve, 1944:316).

Lamentablemente, mientras se encontraba en dichas obras, falleció en la ciudad de Osorno el 4 de Marzo de 1909.

Víctor Domingo Santa María y Márquez  De La Plata.

Nacido en Santiago el 6 de Marzo de 1854. Hijo del ex presidente de la República, S. E. Domingo Santa María González y de Emilia Márquez de la Plata Guzmán.

Se tituló como Ingeniero geógrafo el año 1874 y al año siguiente en minas en la Universidad de Chile(Greve, 1944:287), para posteriormente perfeccionarse y recibir el “título de Ingeniero Civil en la Universidad de Gante (Bélgica) en 1878 (Greve, 1944:287).

De regreso en el país, fue ayudante del Ingeniero V. Aurelio Lastarria, trabajando con él en los estudios del Ferrocarril de Taltal al interior del Desierto de Atacama(Greve, 1944:287).

 Fig. : Imagen, nombre y firma del Ingeniero Domingo Santa María. Fuente de la  fotografía: Historia de la Ingeniería en Chile, año 1944.

El Ingeniero Santa María adquirió gran prestigio en el Ferrocarril del Sur. Cuando estuvo en el año 1882 tuvo bajo su responsabilidad la construcción de puentes ferroviarios, esto después de haber servido un tiempo a las órdenes del Ingeniero Carlos F. Hillman, en la sección de Santiago a Curicó (Greve, 1944:288).

Destacables obras construidas bajo su dirección, fueron los puentes Maule y Lircay(Greve, 1944:288).

Perteneció a la Empresa de los Ferrocarriles del Estado, donde como “Ingeniero en jefe de la segunda sección” (Greve, 1944:288), tuvo mucha importancia para el ferrocarril de Palmilla a Pichilemu, puesto que fue “comicionado por decreto supremo de 22 de Octubre de 1885, para hacer los estudios i el trazado del Ramal de la Palmilla a la costa (Ministerio de Industria y Obras Públicas, 1886 - 1896).

Estuvo en ferrocarriles hasta enero de 1888, sin embargo, ingresaría “como el primer director que tuvo la Dirección de Obras Públicas, le correspondió atender desde luego a la organización de este vasto servicio” (Greve, 1944:288).

Don Domingo Santa María, renunció a la Dirección de Obras Públicas en 1889.

El Consejo de Obras Públicas, había acordado enviar un ingeniero, para que fiscalizara la construcción de los nuevos puentes ferroviarios contratados con la firma Schneider & Cie., del Creusot (Greve, 1944:290). Don Domingo Santa María, fue designado como ese ingeniero fiscalizador el 27 de Noviembre de 1889, a través del acuerdo gestado en el Consejo de Obras Públicas, “se aprobó por Decreto Supremo del 16 de Noviembre de 1889 (Greve, 1944:290), quien viajó a fines de 1889 a Francia, radicándose en la ciudad de París.

Don Domingo Víctor Santa María y Márquez de la Plata, falleció en Santiago el 12 de Diciembre de 1919.

José Aníbal  Sarabia Guajardo[24].

Don José Sarabia G., nació en la localidad de Hospital comuna de Paine el 06 de octubre de 1942. Hijo de Don José Aníbal Sarabia Alarcón, trabajador ferroviario en señales; y de Adriana Guajardo Vivanco.

Fig. : Maquinista José Sarabia, ingresando con la Locomotora 607 al andén 3 de la estación San Fernando. Foto de Juan Cornejo A. Año 2008.

Se trasladó a Rancagua, donde sus estudios básicos los llevó a cabo en la escuela N°1 y luego en la escuela N°3 entre los años 1949 y 1956, para después hacer su enseñanza media en el Liceo Industrial,  en donde se recibió de mecánico industrial el año 1960.

Inicia su vida en Ferrocarriles del Estado, en la ciudad de San Fernando en marzo del año 1962 como limpiador. En 1964 asciende a caldeador y en 1965 llegar a ser Fogonero de vapor. Posteriormente, fue ayudante de tracción de máquinas diesel, eléctricas y automotores.

Bajo el cargo de fogonero, anduvo en la locomotora a vapor tipo 80 N° 851 desde San Fernando a Talca  y Talca a San Fernando, y desde San Fernando a Santiago y viceversa.

Entre las máquinas tipo 57 que trabajó como Fogonero, están la 518[25], 520, 551, 557 y la 607[26] en el lastrero y carguero; como también en la N° 208, tren lastrero. Esta máquina era un poco más pequeña que las tipo 57.

En el año de 1973 fue ascendido a maquinista de tercera. Con este cargo trabajó en el ramal Pelequén - Las Cabras  y en el de San Fernando a Pichilemu, donde incluso condujo las locomotoras diesel 7100.

En 1974 es  trasladado a San Eugenio como maquinista, con la finalidad de hacer el recorrido del ramal Alameda a Cartagena[27], donde al poco tiempo después ser ascendido a maquinista de segunda, fue destinado a trabajar en el trayecto Santiago a Chillán, en las locomotoras eléctricas E - 30 y E- 32.

En el año 1990 es ascendido a maquinista de primera, trabajando desde Santiago a Chillán en el tren nocturno de pasajeros 1 y 2.

En 1994, se acoge a retiro de Ferrocarriles del Estado.

Desde el año 2005 al año 2010 prestó servicio en el Tren del Vino en la locomotora tipo 57  N° 607.

Falleció en Agosto del año 2017.

 Rubén Tobar Frías.

Nació en San Fernando un 28 de Septiembre de 1931, pequeña ciudad de origen y pasado colonial ubicada entre los ríos Antivero y Tinguiririca. Hijo de Pedro Tobar y de Luisa Frías F. Su domicilio fue siempre en un barrio ferroviario, por lo que tuvo desde pequeño una relación cercana con los trenes.

Fig.: Maquinista Rubén Tobar, foto de Juan  Cornejo A., año 2012.

Sus estudios primarios los realizó en la antigua y bien nombrada  Escuela Nº 5 de Hombres de San Fernando, para seguir posteriormente sus estudios en el Liceo de Hombres Neandro Schilling, ubicado frente a la Plaza de Armas de la misma ciudad.

Comenzó a trabajar en la Empresa de Ferrocarriles el año 1950 en la ciudad de Rancagua para trasladarse el mismo año a San Fernando, sin embargo, vuelve nuevamente a Rancagua y permanece entre los años 1953 a 1954 trabajando allí en el macho Alemán (tipo 47) Nº 388. A fines de 1954, regresó a San Fernando, desempeñándose en el macho Alemán Nº377, posteriormente logrando ascender a ayudante de maquinista.

Asentado y trabajando cerca de su hogar, se casó con Amanda Ahumada, quien era hija de Armando Ahumada, el cual había sido maquinista de Ramal costero sanfernandino, cuando la punta de rieles era Larraín Alcalde, para después el año 1926 serlo Pichilemu.

Don Rubén, quien es amigo y colega de José Sarabia –maquinista del Tren del Vino– fue nombrado maquinista el año 1963 estando en San Fernando. De las locomotoras en que recorrió el Ramal a Pichilemu, recuerda la tipo 58 Nº 557[28] y la tipo 57 Nº 522 pasajeros y la Nº 524 que era carguera en la cual trabajaba también José Varela; además de la tipo 80 n°836[29].

En el año 1976 dejó la Empresa de Ferrocarriles del Estado, poniendo término a una incesante vida de ferroviario. Insignes son los recuerdos que recaba en su memoria, recorriendo paso a paso la efectiva labor desarrollada en gran parte en el Ramal San Fernando a Pichilemu.

Anita Torrealba Moraga.

La señora Anita Luisa de las Mercedes Torrealba Moraga, nació el día 10 de Diciembre de 1913 en la localidad de Romeral de la comuna de Chimbarongo. Fue la tercera hija de 5 hermanos: Margarita, Vitalicio[30], José y Ramón. Su madre se llamaba Luisa Moraga.

A los 12 años, llega a San Fernando y comienza a trabajar primero como asesora de hogar, posteriormente como Palomita Blanca.



Fig.:   Sra. Anita Torrealba,  comerciante de la estación San Fernando,  foto  Archivo Familia Cornejo Torrealba.

La señora Anita, trabajó en un principio afuera de la COPEVAL donde vendía sus productos. Posteriormente trabajó como comerciante –pues ellas se autodenominaban así– en la estación de San Fernando. Al llegar allí, estuvo en el segundo andén, pero fue trasladada junto a la oficina del practicante.

Sus productos los colocaba en canastos que a su vez estaban afirmados en un mueble. Dentro de la gama de alimentos a ofrecer, estaban los pescados fritos, frutas, patas de vacuno, sándwich, pasteles, entre otras cosas.

Según recuerda una de sus hijas, la señora Anita, iba en un carretón a comprar al fundo La Palma o a comerciantes que provenían de la costa.

Además de trabajar en la estación de San Fernando, iba a las festividades religiosas, tales como La fiesta de San Sebastián en la localidad de Yumbel; a la festividad de Nuestra Señora de la Merced en la localidad de Alcones (celebrada el día 24 de Septiembre); a localidades cercanas a Marchigüe; a Ciruelos a la festividad de San Andrés (celebrada el día 30 de Noviembre), entre otras.

Según sus hijos y nietos, se caracterizaba por su sencillez, los valores que entregó a sus protegidos, la perseverancia, porque aparte de criar a sus 8 hijos, se responsabiliza de los 5 hijos de su hija mayor quien falleció a causa de una bronconeumonía, a una nieta y además de cuidar a otra persona, la cual no pertenecía a la familia.

Aproximadamente en 1962 la señora Anita, después de varios años de trabajo y además de problemas de salud dejó de trabajar como palomita blanca, dedicándose a las labores del hogar, tomando las riendas de la familia sus hijos mayores.

La señora Anita tuvo 8 hijos –4 hombres y 4 mujeres– teniendo 25 nietos y en la actualidad aproximadamente más de 34 bisnietos.

Cabe destacar, que algunos de sus hijos, se destacaron en disciplinas como el boxeo y el básquetbol, como por ejemplo Nolberto Torrealba[31]. La hija menor de todos los hermanos, Gabriela Torrealba, es la esposa y madre de los autores de este libro.

A pesar de sus años y de tener sólo problemas con la presión arterial, la señora Anita tenía  buen estado de salud, sin embargo, en el mes de mayo del año 2001, se agrava su salud, pues se le declara una arritmia cardiaca[32], que el día 20 de Junio del 2001 a raíz de un infarto provoca su deceso a la edad de 87 años.

                                                   José Manuel Varela Flores.

 Los maquinistas de nuestro Ramal de San Fernando a Pichilemu, eran  mecánicos de sus locomotoras a cargo, por lo que conocían  de manera íntegra su funcionamiento y cualquier falla de ésta en el viaje, la que era solucionada por ellos mismos, puesto que, para ser maquinista de primera, tenían que haber estado antes en locomotoras de patio y de carga.

 Don José Varela F, o Varelita como era conocido por sus colegas, cumplía todos los requisitos para ser un buen maquinista.

Fig. : Maquinista José Varela, foto original y gentileza, Sra. Rosa González Blanco. 

Nació el 01 de Junio de 1921, hijo de Don José de la Cruz Varela Flores y de Rosa Amelia Flores Moreira. Casado con la Sra. Rosa González Blanco en 1957.

Ingresó a ferrocarriles en  la década de los años 1940 estando hasta fines de 1960.

El ramal a Pichilemu, lo recorrió con su locomotora a cargo, la N° 517 y en la 524[33] del tipo 57; y también en las Diesel  tipo D-7100. Innumerables son las jornadas en que pasó estación por estación desde San Fernando hasta la punta de rieles en Pichilemu.

Esta es una pequeña reseña, de quien en vida fuera un gran amigo[34] y que sin duda, el haber sido maquinista, fue una de las mejores representaciones como ferroviario ante sus compañeros.

Falleció en el año 1989.

José Antonio Vidal Parraguez

Don José Antonio Vidal Parraguez, nació en la localidad de Placilla el 02 de marzo de 1939. Hijo de Antonio María Vidal Vidal –nacido en Cardonal en el fundo El Chivato– y de Blanca Parraguez Catalán, nacida en San Miguel de Las Palmas.

 

Fig. :   Sr. José Vidal, foto de Juan. Cornejo A., año 2013.

Al momento de fallecer su madre en Placilla, lo trajeron a la casa de sus abuelos en San Miguel de Las Palmas.

Recuerda que el registro civil en aquellos años era en Pumanque y los bautizaban en la Parroquia más cercana que era la del pueblo de Ciruelos.

Don José Vidal ingresó a ferrocarriles el 12 de Noviembre de 1962 en la estación Larraín Alcalde[35], como operario de vías y obras. Le correspondía el cantón[36] desde el kilómetro 105 hasta 88, aquí se encontraba el Puente San Miguel[37].

Sus tíos Abdón Parraguez y Ramón Parraguez[38] tuvieron un percance cerca del Puente San Miguel. Sucedió que una vez finalizada la faena diaria –la cual era la descarga del carbón del fundo San Miguel de las Palmas– pasaron al despacho[39] en Cardonal, donde vendían muy buena chicha[40]. Terminada su estadía en el lugar, fueron a ver la carreta con bueyes, pero no estaba, ya que los animales se la habían llevado hacía el estero, en busca de agua que producto de un periodo de fuertes lluvias, había crecido demasiado. Como consecuencia de lo descrito anteriormente, los dos hermanos encontraron a los bueyes con el yugo quebrado y sin la carreta, porque había sido arrastrada por las aguas, incluso pasando por debajo del puente ferroviario, y apareció en el tranque de Cardonal[41] con una sola rueda.

El grupo de Larraín Alcalde –al que pertenecía– lo conformaban: el Jefe de Grupo[42] Florindo Román Méndez; ayudante Pedro Donaire Vicencio; Motorista Jorge Pavez Vargas; guardavías Aliro Cornejo, Honorio González, Julio Barros, Víctor Castro, Isaías Ovando, Eduardo González, René Pavéz, José Salinas, Germán Pérez, Antonio Vidal y los carrilanos del sector El Lingue que pertenecían al grupo de Larraín Alcalde, Juan Orellana, Carlos Rojas y su hijo Luis Rojas.

Según cuenta, dentro uno de los lugares que más trabajo demandaba era el kilómetro 113 antes del Paso Inferior Tres Ojos, porque en el invierno generalmente se cortaba el tránsito.

En los motorieles que anduvo señala la FA- 26; 27; 202; 208, siendo la última en la que trabajó la FA -171.

El 20 de junio del año 1979, se integra al grupo de vía de Pichilemu con el cargo de  motorista. En julio de 1986, se acoge a retiro de la Empresa de los Ferrocarriles del Estado.



[1] Bisabuelo de Juan Cornejo Acuña y Tatarabuelo de Juan Cornejo T.

[2] Trabajó en el ferrocarril  de Sarmiento.

[3] Trabajó en la sección vías y obras de la estación San Fernando.

[4] Abuelo de Juan Cornejo A. y bisabuelo de Juan Cornejo T.

[5] Fogonero y posteriormente maquinista del Ramal San Fernando a Pichilemu.

[6] Algunos hermanos fueron ferroviarios del ramal Pichilemu.

[7] Es tío de uno de los autores (Juan Cornejo Acuña)

[8]  Ver en  sobre el ramal Pichilemu y el Turismo.

[9] Como dato anecdótico, se acuerda de la gran afluencia de fieles cuando en 1953 arriba a la estación de Pichilemu el Cardenal José María Caro Rodríguez con el obispo de San Felipe Monseñor Roberto Bernardino Berríos (Fraile Franciscano).

 [10] Ver en esta obra la sección que trata sobre la construcción de la extensión Alcones a Pichilemu.

[11] Lugar del cual sacaban material rocoso para defensa de pilares de puentes ferroviarios en diferentes ríos.

[12] Ver su biografía.

[13] Ordinario Alameda – Pichilemu y viceversa.

[14] No obstante,  recalca que el 11 a y el 12 a no eran el mismo servicio que el ya familiar Ordinario 11 y 12 (Alameda Pichilemu y viceversa), ya que, este último era el que se detenía en todas las estaciones de la vía central hasta San Fernando y luego del respectivo cambio de locomotoras se detenía en todas las estaciones del ramal costino.

[15] Tren local de San Fernando a Pichilemu y viceversa

[16] Era un tren que sólo salía en el verano los días domingo, iniciaba  servicio alrededor de las 7 de la mañana y regresaba en la tarde. El número que lo identificaba era el 39 (ida) y 40 (vuelta).

[17] Era familiar de Antonio Íñiguez Vicuña, en específico prima en segundo grado.

[18] Delia –con ayuda de algunos apoderados– preparaba un paseo para los niños de la escuela los primeros días de diciembre, los llevaban a la Quebrada Honda, tomando el camino  público en dirección a Ciruelos.

Allí en el lugar lleno de vegetación de la zona existían dos pozas, en una se bañaban los hombres y en la otra las mujeres mientras la profesora junto a algunos apoderados les preparaban un rico asado con ensaladas. Ya por la tarde regresaban felices y cansados de tanto jugar y bañarse. Este era el regalo para los niños como término del año escolar.

[19] Actualmente se encuentra preservada en el Museo Ferroviario Pablo Neruda de Temuco. Esta locomotora, posee como característica que en la década de 1980 fue denominada como Montaña Verde por ser pintada de ese color.

[20] Mientras hacía el curso se quedaba en el hogar de la Maestranza San Eugenio.

 [21] Asistente y guarda nocturno

[22] Periodista - escritor

[23] Mientras hacía el curso se quedaba en el hogar de la Maestranza San Eugenio.

[23] Tomándose como inicio el año de aprobación de la ley de la extensión a Alcones, quedando ésta como estación terminal hasta aproximadamente el año 1912.

[24] Entrevista del 22.05.2013 a las 09:50 a.m., por Juan Cornejo Acuña.

[25] El Maquinista era don Santiago Donoso.

[26] En esta locomotora a vapor, trabajó en el sur del país. Posteriormente, fue maquinista cuando prestó servicio para el Tren del Vino.

[27] El cual en la actualidad presta servicio de carga y ocasionalmente  el Expreso del Recuerdo, solo hasta San Antonio, producto que de esta última estación hasta Cartagena fue levantada.

[28] En esta locomotora trabajó con don Raúl Montecinos.

[29] Locomotora que queda de repuesto, por si había una en falla.

[30] Quien asociado con Juan Carrasco eran dueños de la panadería, pastelería y fuente de Soda La Chilena, cercana a la estación.

[31]  Quien practicaba Boxeo, disputó el título nacional de esta modalidad en el fortín ferroviario de San Fernando

[32] En lenguaje médico, significa una desorganización del ritmo cardiaco, es decir el ritmo cardiaco en algunos lapsos es normal, en otros es acelerado y en otros casos es lento.

[33] En una conversación el maquinista Rubén Tobar, contó que Varelita, como le decían cariñosamente, era buen cocinero, y cuando  iban hacia Pichilemu en la 524, tenían una olla a vapor  la que al poseer una cavidad podía ser conectada a la locomotora y  con eso calentar  su almuerzo. También en ocasiones, se detenía en Nancagüa a comprar un kilo de carne y el mismo maquinista la cocinaba en esa olla a vapor.

[34] Ver en el libro Historia del Ramal San Fernando a PichilemuRecuerdos de Mi Infancia, Juan Cornejo Acuña con maquinista José Varela.

[35] Ubicada en el kilómetro 108.5500 del Ramal a Pichilemu.

[36] Nombre que se daba al tramo que tenían que mantener la vía.

[37] Los lugareños con sus carretas tirados por bueyes pasaban por debajo del Puente San Miguel, en aquellos años había un desvío del camino actual hacia el estero.

[38] A Ramón  le decían Ramón largo, ya que, tenía una estatura aproximada de dos metros cinco centímetros.

[39] Así denominaban a las Cantinas.

[40] Licor producto de la uva.

[41] En aquellos tiempos el tranque tenía una profundidad de veinticuatro metros, posteriormente se profundiza a 26mts.

[42] Antes se denominaba Cabo de cuadrilla.